La Zona de Confort
La zona de confort es ese espacio mental que conforman nuestras crencias y rutinas a las que estamos acostumbrados y nos producen una sensación de seguridad y control.
Salir de nuestra zona de confort nos produce en ocasiones ansiedad e incertidumbre a lo desconocido, aunque igualmente, es la zona en la que nos esperan los cambios, mejoras y progresos.
Permanecer en la zona de confort nos hace caer en la rutina y estancarnos sin dar posibilidad al cambio, al descubrimiento y a la evolución.
Salir de la zona de confort, es un paso muy importante para que se produzca un crecimiento como personas, tal vez, sea en forma de perseguir nuestro sueño, reto u objetivo que nos impulsa a salir de las viejas rutinas y a reordenar nuestra vida en otra dirección haciendo cosas diferentes a las que hemos hecho con anterioridad.
Sin duda, es una de las expresiones más significativas porque define muy gráficamente el “acomodo de aquellas personas que han renunciado a tomar iniciativas que les permitan gobernar sus vidas”.
Salir de la zona de confort implica que aceptemos que en algún momento estaremos con un pie en el aire, y con menor estabilidad, aunque momentánea, apostar por seguir, nos permitira dar el paso para recobrar estabilidad y por supuesto crecimiento y evolución.